A partir de dos reconocimientos fundamentales se inicia una nueva exploraci n racional del proceso existencial que se confirma plenamente en el proceso UNIVERSO. El primer reconocimiento es el de un subdominio del espacio de referencia matem tico que representa realmente a la dimensi n primordial del hiperespacio energ tico multidimensional de naturaleza binaria sobre el que tiene lugar el proceso UNIVERSO. El otro reconocimiento es el de la hebra energ tica y operacional primordial que se describe por una serie en el subdominio del espacio de referencia matem tico que es an logo al hiperespacio energ tico en el que tiene lugar y opera la hebra primordial. La hebra energ tica y operacional primordial es, respectivamente, el arreglo energ tico trinitario primordial y la interacci n que tiene lugar en l, desde los que se inici y por los que contin a desarroll ndose el proceso UNIVERSO, a partir de un entorno de energ a disponible en una presencia eterna que ha sido reconocida y confirmada exhaustivamente por la ciencia. La hebra energ tica y operacional primordial nos proporciona la relaci n entre los dos componentes de la unidad energ tica de naturaleza binaria: masa y frecuencia de las unidades de carga primordial; la relaci n entre el espacio y el tiempo relativos; y nos provee la relaci n energ tica fundamental entre los cambios del potencial universal y los cambios resultantes sobre los sistemas energ ticos trinitarios cuya revisi n podemos llevar a cabo partiendo de la versi n que ahora conocemos como momento y expresamos por la relaci n M=m.v. Para quienes se interesan por la disciplina racional de teolog a para explorar y cultivar nuestra relaci n con el proceso ORIGEN al que llamamos Dios, el aspecto fundamental es el mecanismo por el que toda la informaci n existencial est al alcance del ser humano a trav s de nuestra mente. La mente del proceso SER HUMANO es un subespectro de la componente existencial consciente de s misma, es decir, un subespectro de la mente de Dios.